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| Foto tomada de la Revista Antorcha 1955. |
Antonia García Cabello, doctora en pedagogía, maestra de instrucción pública, poetisa y periodista.
Se dispone de muy poca información biográfica. No hemos podido precisar las fechas de su nacimiento y muerte ni tampoco los lugares donde estas se produjeron.
Ejerció la docencia en la Escuela Pública No. 4, que se encontraba ubicada en la calle 15 entre 8 y 10 así como en la Escuela Nocturna, que se localizaba en la calle 15 entre 2 y 4, frente al parque Juan Delgado. Fue profesora de la Escuela Superior del CIR.
Presidió el Colegio de Periodistas Profesionales de Santiago de las Vegas. Fue Directora del periódico "El Constitucional", que aparecía en Santiago de las Vegas y que fundó a raíz del golpe de estado ejecutado por Fulgencio Batista en 1952. Se destacó en la lucha contra la dictadura de Batista. Tuvo a su cargo por muchos años la página lítero-cultural de la Revista Antorcha.
En 1943 es fundadora, junto a Gabriel Gravier, Gregorio Vázquez Pérez, Marcelo Salinas, Pedro S. Acevedo, Rina Cortada, Francisco Fina García e Isabel Espinosa del Grupo Selección.
Contrajo matrimonio en diciembre de 1944 con Francisco Fina García, Historiador de la ciudad, maestro, poeta y periodista.
Su producción periodística y literaria anda diseminada por revistas y periódicos. No dejó bibliografía lírica. Se le clasifica como una autora de la segunda época republicana. Nótese, una tendencia general hacia las formas del movimiento vanguardista, aunque ella no queda reconocida como parte de ese movimiento en la lírica local. De su obra poética localizada se hizo una selección de aquellos textos que nos resultaron más meritorios y esa es la muestra que exponemos en este trabajo.
Veamos en primer término sus poesías de amor. Apasionada y romántica, directa y soñadora se muestra Antonia en sus poemas de amor.
el alma se me llenaDESEO
En esta mañana lluviosa de otoño
quisiera en mis ansias llegar hasta ti,
prenderme a tu brazo, mirarte a los ojos...
estar mucho rato mirándote así.
Sentir como vibra mi mano en tu mano,
contemplar tus labios tremantes de amor,
sentir en mi pecho un cielo adorado
de dichas y ensueños, pleno de fulgor.
Como un lirio blanco llegar a tu alma,
darte mis aromas, mis cálidas ansias,
todas mis ternuras plenas de candor.
Vivir a tu lado las horas supremas
de dichas y ensueños, tranquilas, serenas,
en éxtasis puro del más puro amor.
LA ESPERA
Tanto te quiero...
es mi cariño tan verdadero,
que cuando tardas
me desespero.....
Siento una angustia que me destroza,
siento una pena que me tortura,
siento zozobras, siento amarguras,
me siento toda febril, nerviosa.
Nunca he pensado
que tu cariño se ha aminorado;
pero es que temo que alguna pena
cubra tu frente pura y serena.
No sé que siento
dueño adorado, cuando te espero,
cuándo te tardas...
todo mi pecho late violento,
se hace muy triste mi pensamiento.
Tanto te quiero
que cuando tardas
me desesperoNO SÉ
(A mi queridísimo Paco en el día de su cumpleaños)No sé si son tus manos,si es tu dulce miradao el metal de tu voz;no sé si son tus labiosamorosos y tiernos,no sé si es el cariñoque se te sale del almalo que me hace feliz.No lo sé, dueño mío,pero sí sólo seque cuando estoy contigosoy feliz cual los ángelesque están cerca de Dios,y cuando tú estás lejossiento un hondo vacíoque no puedo explicar;
de nostalgia infinita
y se oprime mi pecho
con inmenso pesar.....
Santiago de las Vegas, Enero 29 - 1944
Junto a tí pasan las horas
y no las siento pasar...
Junto a tí gozo una dicha
que no la puedo expresar...
La luna encuentro más blanca,
el sol más hermoso está,
las flores son más radiantes,
perfumadas y fragantes
cuando trenzamos las manos
y las miradas aunamos
en un inmenso anhelar...
Junto a tí, todo en mi vida
es dicha y felicidad,
es música y poesía,
es gozo y es alegría,
es murmullo del palmar,
es remanso dulce y bueno
donde mi espíritu deja
su zozobra y su penar
y en lecho de seda y oro
de los ángeles, en coro
se siente toda arrullar.
Cuando estoy junto a tu alma
en esa plácida calma
de tu infinita ternura,
no sé que inmensa dulzura
me llena de placidez,
y entonces me siento alada,
no sé si ángel o hada
hasta los cielos subir
y veo entre nacaradas
nubles blancas y rosadas,
mi dulce ensueño fundir
con la mágica hermosura
y la infinita ventura
del encanto del vivir.
BAJO EL PARRAL
Bajo el parral dorado
de mis recuerdos,
sobre el blando musgo
de mis anhelos,
siento que como daga
rasga mi pecho,
algo remoto y triste
que en mí no ha muerto.
Y cuando el desaliento
de mis afanes
se trueca en rebeldías
de mi alma fuerte;
siento que amo la vida
como a una hermana,
y echo un velo de seda
sobre la muerte.
Y en el parral hay cánticos
de avecillas parleras,
y en el musgo han nacido
mil florecillas nuevas,
y en mi pecho hay un eco
silencioso....., lejano
como el arrullo suave
del teclar de un piano.
HOY TENGO EL ALMA BLANCA
Tengo hoy mi alma blanca
como un manantial;
en mi mar interno
brillan albas perlas
en conchas de nácar
y rojo coral.
Siento tan profundo
la felicidad...
no hay mortal que goce
de otra dicha igual...
´
Tomaría todos los perfumes del mundo,
todas sus flores puras,
las músicas que en todos
los tiempos arrullaran
ardientes corazones...
todas las poesías
que cantan los amores
y encontrar no podría
nada que se igualase
a mi grande alegría.
Soy para el dulce amado
un hilacho de luna
y me siento arrullada
por la canción de cuna
que arrulló al Nazareno
en su humilde pesebre
de pajas y de heno.
Se me dilata el alma
y se me ensancha el pecho;
es tan grande mi dicha
que no me cabe dentro
y me cubre los ojos
y me tapiza el rostro...
se enlaza a mis cabellos
y se enlaza a mi cuerpo.
Hoy tengo el alma blanca,
blanca, como el candor
de las vírgenes santas...
Hoy tengo el alma blanca,
los ángeles del cielo
le han prestado sus alas
y la he visto sedosa,
balancearse, encantada,
bajo el cielo estrellado
entre nubes de plata...
Hoy tengo mi alma blanca,
blanca como los lirios,
blanca cual la ternura
que tienes en el alma,
blanca como el ropaje
de feliz desposada...
Hoy tengo el alma, amado,
blanca como las aguas,
como la luna, blanca....
EL AMOR
(dedicada a mi gentil amiga, la Srta. María Luisa Viza Blanco)
Tu nombre estará escrito,
con luz de la mañana,
en todas las fontanas...
Tu nombre estará escrito
con trinos y armonías,
en todos los trigales...
Tu nombre estará escrito,
con flores y perfumes,
en todos los vergeles...
en todos los caminos...
en todos los sendales,
como en las serventías...
Tu nombre estará escrito,
con letras indelebles, en oro y pedrería...
y será siempre un canto, un hermoso poema,
una tierna poesía...
Vivirá siempre, siempre...
y será siempre el mismo, aunque será uno nuevo
en cada corazón que le abra su regazo
y le ofrezca su seno...
En cada alma anhelosa que le tienda sus ansias
con fulgores de cielo...!
Verano de 1956
TRIBUTO
Rosas blancas y rojas,
lirios, mixtos, claveles,
azucenas de plata,
vívidas amapolas,
nardos inmaculados,
impolutos jazmines,
que en el hermoso Mayo
abrís vuestras corolas en todos los jardines
llenando de perfumes el cosmos, por entero,
yo os invito a que en regla profusión de colores,
de fragancia, de aromas, de bellezas y primores,
os levantéis gallardas, con humana ternura,
para ascender al cielo en divina eclosión
y allí, entre los arcángeles, ángeles, querubines,
santas, santos, vestales,
ofrezcáis el tributo de vuestras maravilla,
a exaltar lo más bello, lo más santo y sublime,
lo más inmenso y grande, lo más alto y glorioso
lo más dulce y más tierno, lo más esplendoroso...
¡El amor de las Madres!
De las Madres que viven para dicha del mundo,
para luz y consuelos...
Y de las que han volado, como blancas palomas,
a los predios del cielo...!
También esta poetisa escribió sobre temas religiosos, en los que además de dejar constancia expresa de su fe cristiana enlaza el mensaje de Dios denunciando la realidad social de la época que le tocó vivir. Veamos.
EL SALVADOR
En una noche de invierno,
oscura triste y sombría
nació el Salvador del Mundo
para librar a los hombres
de ignominias y herejías...
En un humilde pesebre
vino al mundo entre fulgores
el Salvador de los hombres,
adorado reverente,
por reyes y por pastores.
Entre sus labios de grana
se desbordó la dulzura,
y en su pecho generoso
un caudal inagotable
de insospechada ternura...
Vino a traer en sus labios
mensajes de Amor y Paz,
y en su alma tan divina
como una fragante rosa,
Floría la Caridad...
Su palabra bondadosa
los corazones tocaba
y a los ímpios, en seres
humanos y generosos
al instante los trocaba.
Su mano siempre tendía
al pobre menesteroso;
tan grande era su ternura...
tan sublime su dulzura...
su corazón tan hermoso...
En sus predios siderales
nos aguarda el Salvador
con sus dos brazos abiertos
para premiar nuestra obras
con la gracia de su amor...
¿Quién no habrá de desearlo?
¿Quién no lo ansiará ferviente?
El ideal del Cristianismo
es disfrutar de la Gloria
junto a Dios eternamente.
ENVIADO DE AMOR
Por todas las partes se escucha una voz:
"Pronto vendrá al mundo, como el mismo sol,
un hermoso niño, el Hijo de Dios,
trayendo a los hombres, en prédica ardiente,
la Paz y el Amor...!
"Vendrá, mansamente, a luchar con ansia, con fe, con fervor,
contra todos los vicios de todos los hombres,
y sus injusticias, y sus tropelías,
iniquidades y sus herejías,
contra sus soberbias y sus tiranías..."
Y los que humillaban, y los que mandaban,
aquellos soberbios que tiranizaban,
que de las haciendas y vidas ajenas,
por su cuenta y riesgo, solos se adueñaban,
saliéronle al paso, para aniquilarlo...
En su poderío, con la fuerza en mano,
de aquellos presagios se carcajearon:
"Que maten a todos los niños que nazcan
en aquella fecha que estaba anunciada
para la llegada del Niño Divino".
Así resolvían el grave problema,
así todo estaba ya solucionado.
Pero...sólo fueron otros inocentes los decapitados.
El Niño Divino, aquel enviado,
El dulce Mesías, que se hubo anunciado,
no pudo por mano del crimen, ni el odio, ni el vicio
ser aniquilado.
Lo escrito, está escrito,
y al pie de la letra se hubo cumplido
todo cuanto el cielo hubo decretado.
Y vino a la tierra aquel enviado,
quien diera más tarde su sangre y su vida por todos los hombres,
a traer en ansias de todas sus fuerzas
la dulce palabra
de amor y ternura a todas las almas...
Aún suenan vacías,
en las oquedades y en las serventías...
las bellas palabras
del Dulce Mesías...
Y hay tan pocos pechos que las aprisionan...
Y hay tan pocas almas que las sientan suyas.
Y muchos, y muchos que las pisoteen y que las destruyan...
Hay muchos Herodes y muchos Pilatos...
Hay muchos que quieren matar la concordia, por sus ambiciones.
Hay muchos Tiranos, muchos opresores,
que hieren y matan la dulce palabra de Amor y de Paz.
Hay muchos traidores,
que clavan la espada en medio del pecho del propio Jesús.
¡Alcemos el grito de Viva el Amor, la Paz, la Concordia, en nombre de Dios!
¡Cesen ya por siempre tantas felonías,
tantos atropellos,
tantas tiranías,
que reine en la Tierra la dulce palabra del santo Mesías.
Que depongan todos la cruel ambición!
¡Que vuelvan los ojos al Divino Cristo,
y oigan su palabra de luz y ternura, de Paz y de Amor.
Navidad de 1956.
Antonia García Cabello también llevó a su poesía el sentido patriótico que la acompañó durante su vida. Ejemplos los fragmentos que siguen:
CANTO A JUAN GUALBERTO GÓMEZ
(Hombre, Periodista y Patriota)
Fragmento
III
Rendimos pleitesía al Hombre que alentara
con su espíritu digno, sin mácula y sin tacha.
Rendimos pleitesía al Periodista honrado
que levantó su pluma siempre con hidalguía;
contra los Dictadores y contra los Tiranos;
contra toda Injusticia y toda Villanía...
Rendimos pleitesía al valiente patriota
que supo darlo todo por su patria humillada;
que sufrió cautiverios, exilios y dolores,
amarguras sin nombre, penas y sinsabores....
hasta que la vió libre de oprobiosas cadenas.
Doblamos la rodilla ante la gran figura
de aquel hombre gigante, que tuvo piel oscura,
que derramó su alma, iluminara un siglo
de luz radiante y pura...
para ejemplo de un Mundo,
redención de su raza
y libertad de Cuba!.
Santiago de las Vegas, Julio de 1954.
AL TITÁN DE BRONCE
(Fragmentos)
Sacudió su melena el león impetuoso
en su pecho de fuego desplegó la bandera
y en su gloriosa frente fulguraron estrellas...
El brazo leonidano enarboló el acero,
rasgando las tinieblas de aquella noche infame,
con fuego de leyendas...
Sus batallas sin nombre, nunca más igualadas,
le abrieron de la Historia
las aureoladas páginas
al recoger sus glorias....
En Baraguá protesta, con civismo que pasma,
después, en pie de guerra
a la nación levanta,
invadiendo en un gesto de sin par heroísmo,
a todo el territorio,
desde Oriente hasta Mantua.
El Titán, el más grande gladiador de la Patria,
seguirá en nuestros campos, seguirá en nuestras almas,
alentando el anhelo de sus sagradas ansias....
Seguirá vigilante, con la pupila alerta
mirando nuestros pasos,
y alentando las ansias de todos sus hermanos
de lograr que su tierra
sea feliz y dichosa
y tengan paz sus hijos
para vivir felices, en fraternal contento
unidos por el santo y puro sentimiento,
de una eterna hermandad....
Santiago de las Vegas, Junio de 1958.
Su obra también incluye gestos y emociones de solidaridad y de reconocimiento. En esta muestra los poemas A María Granados, El Vendaval y El Ángel Singular de Dien Bien Phu.
A MARÍA G. GRANADOS
María, hermosa niña de soñadores ojos,
que fueron un romance al alma de Martí;
María, cándida niña, cuyos divinos labios,
el amor más sublime supo hacerlo sonreír...
Su larga cabellera, espléndida y sedosa,
se salpicó de estrellas, al caricioso roce
de la tierna mirada del bardo Soñador...
en sus manos de lirios se encendieron las rosas
y el jazmín impoluto de sus niveas mejillas,
en éxtasis sublime, se estremeció de amor.
María, casta niña de alma sensible y pura,
que cual arpa encantada,
vibró en ensoñaciones, de infinito candor,
al sentir junto a ella la exquisita fragancia
de aquel alma sublime, de aquel gran Soñador.
La niña deliciosa, de excepcional encanto,
aprisionó aquel alma entre sus niveas manos
y con ella guirnaldas, tejió, de oro y zafir
para ceñir su frente, para adornar su cuello...
más, cuando esos destellos
se eclipsaron la niña, no pudo más vivir...
Se entornaron entonces los soñadores ojos,
y la sonrisa dulce de sus labios huyó;
su larga cabellera se quedó sin estrellas:
en sus manos de lirio la rosa marchitó,
y el jazmín impoluto de sus niveas mejillas,
como un lirio de cera, al fin, languideció.
EL VENDAVAL
(Dedicada al compañero periodista José Pardo Llada).
Era un sueño, era un mal sueño.
¿Cómo sucedió? No sé.....
Círculo de plata fría,
a horcajadas sobre el viento,
la trasnochadora luna
volaba entre los maltrechos
girones de seda blanca
que ornamentaban el cielo....
Eran saetas de fuego
los suspiros escapados
de los recintos estrechos
que golpeaban, cual badajos,
en terrible desespero,
corazones impulsados
por crepitares violentos...
Era una calma... terrible
calma de los cementerios,
en que los sauces lloraban
y, en quejumbrosos lamentos,
el aullar de los pinares,
confundiéndose en la bruma
de los trenzados cabellos
del hada negra del bosque,
que se balanceaba, inquieta,
en el hondo sortilegio
de la magia de la noche,
azotaban, cual flagelos,
los corazones heridos por tanto dardo de fuego.
Era una calma... una calma
de esas calmas que preceden,
las terribles tempestades,
que detienen las corrientes
que riegan savia de vida
por los cauces de las venas...
Se desató duro y fiero el vendaval,
arrasando con la tierra y con el cielo,
y lanza en ristre, cegando,
fué los campos convirtiendo
en desolados desiertos....
no golpearon los badajos
los apretados recintos, que paralizó el dolor,
la rabia y el desespero...
Con los dientes apretados
y rígido todo el cuerpo,
en un espasmo de ira,
se descuartizó el silencio,
y las pupilas, insomnes, rasgaron el firmamento,
con una saeta de fuego, que trascendió hasta lo eterno.
Nov. 1 de 1954.
EL ÁNGEL SINGULAR DE DIEN BIEN PHU
(Dedicada a la enfermera Hortensia Pérez en sus Bodas de Oro con la profesión)
Entre el rudo fragor de la batalla,
cuando tronaba el cielo y en el viento
el dolor cabalgaba;
cuando el helado soplo de la muerte
los espacios cruzaba;
cuando estallaba en infernal rugido
el intenso tremar de la metralla...
surgió una blanca flor, surgió una estrella,
un ángel de los cielos descendió...
Todos se preguntaban sorprendidos:
¿Quién era, quién, la aparición aquella?
Aquella aparición, pues era Ella.
Ella, una heroica mujer, hermosa y bella...
Blanca paloma que en sublime vuelo,
llegó a aquel torbellino de dolores,
a prodigar ternuras y consuelos...
a restañar heridas de los cuerpos...
Fué cual rayo de luz en las tinieblas,
que rasgando las sombras tenebrosas
todo lo iluminó.
Fué como un lirio blanco, inmaculado,
que entreabriendo su cáliz aromado,
todo lo perfumó...
Con sus divinas manos de azucenas,
generosas, sublimes y serenas
fué prodigando amor...
derramando dulzor en la amargura
con su santo cariño y su bondad...
Enviaba Mensajes de consuelo
a las madres, los hijos, las esposas,
que distantes, con ansias, anhelaban
noticias de los seres que yacían en sus puestos de honor...
A todos con ternura sonreía,
y solícita, presta y diligente,
como un ángel de bien y Caridad
la dulce Genevieve se convertía
En madre cariñosa y abnegada,
que a todos sus consuelos prodigaba
con sublime piedad...
Fué un hada milagrosa, fué una aurora,
que lo llenara todo con su luz,
y Genevieve de Galard Terraube,
la heroica francesita inigualable,
Fué bautizada con el dulce nombre
de "EL ÁNGEL SINGULAR DE DIEN BIEN PHU"
Stgo. de las Vegas, mayo 3 de 1954.
Fuentes consultadas:
- Gómez, Mario. Francisco Fina y
- Revista Antorcha. Año IX, Nos. 4, 6, 8, 12, febrero, abril, junio, octubre de 1954; Año X, Nos. 1, noviembre de 1954 y 5, marzo 1955; Año XI, No. 10, agosto de 1956; Año XII, Nos. 2, diciembre 1956 y 8 junio de 1957; Año XIII, No. 2, diciembre de 1957. Colección del Museo Histórico. Santiago de las Vegas.
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