miércoles, 21 de septiembre de 2022

La familia del Begonia: Publicaciones de Santiago de las Vegas


 

Título:                          La Familia del Begonia.

Autor:                          Dr. Marat Simón Pérez-Rolo
                                     Abogado. Periodista. Promotor Cultural.
Dimensiones:              21.5 cm. X 13.5 cm.
Año de edición:          1999
Editado por:                Lic. Alfredo Pino Ortega
Número de páginas:   50

El Dr. Marat Simón Pérez-Rolo en esta obra relata la historia de una ejemplar familia santiaguera y sus vínculos a sucesos de la vida local y nacional.

Detenidos en las calles 17 y 2 de Santiago de las Vegas, ante el arco de la portada de la finca “La Josefina”, conocida también por “Pajarito”, que fuera propiedad de Eduardo Hidalgo Gato —uno de los 4 santiagueros que suscribió los Bases del Partido Revolucionario Cubano junto a José Martí— vemos sobre el arco de la portada que cuelga una valla grande donde se lee: Jardín Begonia. 

Fue en 1920 que Hidalgo Gato sugirió a la familia de los esposos Joaquín Gómez Miranda y María Fidelia Martínez Amaro que se establecieran en Santiago de las Vegas. 

A lo largo de las 50 páginas de la obra que hoy comentamos el Dr. Simón recoge la historia de la familia Gómez-Martínez y describe su participación en el desempeño de la sociedad santiaguera desde 1920 hasta 1998. Según apunta el editor de la obra «de paso, salva para la propia historia comunitaria nombres de figuras y acontecimientos un tanto olvidados, que vienen a enriquecer la narrativa del tema principal» y que evidentemente por problemas de espacio, obviamos en este resumen que extraemos de la publicación en cuestión. 

Describe el autor en su texto aspectos relacionados con la vida cotidiana del Santiago de las Vegas de entonces en el período entre 1920 y 1940. Igual describe los tiempos de infancia y adolescencia de los hijos del matrimonio. Joaquín se graduó con notas de sobresaliente en las especialidades de mecánica automotriz y soldadura en la Escuela de Artes y Oficios. Fue el dueño de un muy conocido taller automotriz en Santiago de las Vegas. Lo recordamos como el Taller de Joaquín Gómez. Emma asistió en La Habana al Instituto de Segunda Enseñanza. “Bebo” Gómez se graduó como técnico medio en la Escuela Técnica Industrial de Rancho Boyeros en la especialidad de herrería y pailería. “Beba” comenzó los estudios de bachillerato pero no los concluyó. “Nena” logró concluir sus estudios de maestra, habiendo creado a fines de los años 50 en Santiago de las Vegas la Academia “Adelanto”. Rosa y Martha del Pilar constituyeron familia.   

Refiere el autor que sobre 1939 llegó a Santiago de las Vegas Federico Hernández Alum quien designado por Blas Roca desde la Dirección Nacional del Partido Comunista en La Habana como Comisario Político, se hizo cargo del trabajo ideológico y de la organización de la lucha partidista en Santiago y sus poblados vecinos.  Su nombre de guerra fue “Wagner”. 

Así las cosas “Wagner” se enamora de Emma Gómez, contraen matrimonio sobre 1940. Viven unos meses en La Habana y próxima a dar a luz regresan a la finca en Santiago de las Vegas, donde el 19 de diciembre de 1942 nació su hijo al que llamaron Federico, pero conocido por todos en Santiago como “Fisher”. 

El surgimiento del Jardín Begonia es relatado por Emma Gómez. Resulta que condiscípulos del Instituto de La Habana, donde ella estudiaba, realizaron una visita la Estación Experimental Agronómica. Al término, ella los invitó a la finca donde le ofrecieron refrescos y golosinas. Para sorpresa de Emma todos sus compañeros se estaban vaciando los bolsillos de sus pantalones, camisas, blusas o sayas dejando caer pequeñas plantas y semillas que, según decían, habían sido tomadas por ellos como recuerdo de su recorrido por la Estación Agronómica. Recriminados en tono familiar por Joaquín, el padre de Emma les prometió a los estudiantes que sembraría las posturas y las semillas para que no se perdieran.  De ahí nacieron begonias, anturios, violetas de Jamaica y numerosas plantas ornamentales, de flores.  Eso fue lo que constituyó el germen del Jardín Begonia. 

Para 1940, ya María Fidelia había logrado fomentar el mayor vivero de plantas ornamentales de la provincia.  Incorporado “Wagner” a las labores de siembra, cultivo y recolección de las plantas y con sus dotes de organizador eficaz y de incansable trabajador, unido todo ello a una honestidad a toda prueba, llegaron a convertirlo en un colaborador excepcional. 

En la década de 1940 el negocio del Jardín Begonia prosperaba y calladamente pasaban los años contemplando el trabajo de Joaquín y María Fidelia y de una segunda generación encabezada por Emma y su esposo “Wagner”.  Joaquín Gómez Miranda fallece en 1961.  María Fidelia y su yerno “Wagner” continuaron al frente del negocio, engrandeciéndolo y contribuyendo a su esplendor, a través de los años.  María Fidelia Martínez Amaro murió en 1973. “Wagner” asumió la responsabilidad de los negocios del Jardín, y el Begonia se propagandizó por los trabajos que éste llevaba a cabo.

Obligados a hablar de Federico Hernández Gómez (Fisher), nieto de Joaquín y María Fidelia, hijo de Federico Hernández Alum ya conocido como “Wagner” y de Emma Gómez Martínez. ¿Por qué? Porque es el creador de “La Peña del Begonia”. Desde pequeño tuvo inclinaciones a la música y sus dotes como vocalista lírico eran sobresalientes. Por esa causa cursó estudios con la profesora rusa Mariana de Gonicht. Formó parte del Coro de la Opera Nacional de Cuba y se integró al Grupo de Teatro Lírico “Gonzalo Roig”. 

En los años 90 “Fisher” se convierte en protector de las manifestaciones del arte en la comunidad santiaguera y funda la conocida “Peña del Begonia”, de reconocido impacto en su época.  La “Peña del Begonia” constituyó un espectáculo artístico-musical formado por cerca de veinte vocalistas del género lírico y popular. 

Ese es el espectáculo que “Fisher” fue creando a través de los años y que se presentó en numerosos escenarios, incluyendo algunos programas de televisión.  ¡Con cuanto orgullo y regocijo este nuevo Mecenas pueblerino se proyectó! ¡Y cuán agradecida le fue nuestra comunidad a través de las instituciones culturales a las cuales sirvió!  Ese reconocimiento le llegó a “Fisher” de parte del Museo Histórico, de la Casa de la Cultura, de la Biblioteca PúblicaMás Luz”, que siempre le resultaron deudores. 

Al fallecer “Wagner” en 1993 “Fisher” heredaría una empresa seria, que venía prestando servicios eficientes a los particulares y al Estado. En la década de 1990 se insertó en la preferencia de organismos muy especializados y exigentes, como es el caso de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana o el del Ministerio de Relaciones Exteriores, por citar sólo dos ejemplos. 

Hemos tratado de ofrecer un panorama acerca de lo que trata esta publicación, la historia de una familia asentada en Santiago de las Vegas desde 1920 y resaltando la contribución que los fundadores y sus descendientes han aportado a la sociedad santiaguera. 

El Dr. Simón en su exposición final expresa: 

            «Porque, a fin de cuentas, esta Familia del Begonia representa un pedazo vivo de la historia de la patria, que se hace necesario contarla para que la conozcan la actual y futura generación; para que siempre perduren los valores tradicionales de los más puro de nuestras raíces; para no dejar morir nunca el culto a la bondad, al trabajo creador y a la práctica de la más pura amistad entre los hombres». 

Resulta interesante la lectura de este material del cual solo se imprimieron 200 ejemplares, puesto que muchas de las referencias y personajes que en ella se mencionan ya dejaron de existir. Solo la memoria, el recuerdo y la publicación que hoy comentamos, perduran.

 

 


5 comentarios:

  1. Sigo recordando a Fisher porque gracias a él mis amigos y yo aprendimos a escuchar la música de Richard Wagner y dirigió a nuestro grupo de jóvenes en el lanzamiento de una zarzuela. ¡Todos mis elogios a quien fue una gran figura de la cultura santiaguera y cubana!

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    1. HOLA Rafael te escribo en nombre de Martica ( prima hermana de Fisher ) ella te quiere contactar . Me puedes escribir a mi email por favor yosvi0367@gmail.com. gracias

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  2. ¡Increíble cómo se constituyó el jardín! A veces la realidad es más curiosa que la ficción. Me encantan estos relatos tan interesantes de persona de nuestro pueblo que, de no ser rescatados aquí, quedarían en el olvido para muchos de nosotros.
    Giselle

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  3. Nací y me crié en la calle 8 entre 15 y 17, desde donde y cuando abrí los ojos, conocí a toda la familia del portal, me refiero a la casa de Joaquín Gómez hijo y de Blanquita su esposa de toda la vida, que procrearon 4 hijos, Joaquín (Kico), Gloria, Ramiro y Nelson, el más pequeño. Por consiguiente Fisher visitaba frecuentemenet a su tío y sus primos, y de esa forma lo conocí desde muy niño. El Portal y Joaquín eran un semillero de niños, que jugaban en la calle, y gritaban y se reunían en su puerta. Joaquín fue un señor muy servicial, un hombre trabajador por excelencia, que murió en su misma casa donde vivió la vida entera, en su viejo taller familiar, donde reparaba lavadoras rusas defectuosas y otras cosas. Esa etapa de Fisher como mecenas cultural me la perdí, sin embargo, nunca he olvidado, que en una ocasión me regaló un libro en dos tomos titulado "El asno oficioso y otros cuentos", de un importante escritor estadounidense llamado "Erskine Caldwell", que lo perdí por culpa de las polillas, que se lo comieron, y que lo sentí perder. Vaya este recuerdo dedicado a esta etapa de la vida de vecinos inolvidables, entre llos el cantante y amigo Fisher. Mario A. García Romero muchomario1945@hotmail.com

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  4. Yo soy del begonia y su historia no tiene nada que ver con su verdadera historia

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