La naturaleza humana es compleja en lo que a sentimientos se refiere. ¿Quién no ha escuchado hablar del “Síndrome de Ulises”, nombre dado por los sicólogos a la cruel nostalgia que sufre el emigrante cuando deja tras de sí todo su entorno y se enfrenta a un mundo desconocido donde todo le resulta ajeno y hostil? Hoy en día gracias a las nuevas tecnologías podemos mitigar en algo la soledad de la distancia. El uso de Internet es un tema polémico, pero resulta que cuando se emplea para causas nobles tenemos que rendirnos ante el encanto que nos brinda la posibilidad de una comunicación amplia como baluarte del más preciado tesoro de la raza humana. Hace relativamente poco tiempo mis recuerdos sobre Santiago de las Vegas solo se centraban en la familia y amigos que aun viven allí y algún que otro destello que quizás a modo de comparación con la actualidad podía tener. Un buen día y quizás por azar todo cambió: encontré una pagina en Internet donde hablaba de un proyecto de rescate histórico de nuestro pasado mostrando fotografías, reseñas, y artículos; donde sin matices políticos de ninguna índole recreaban una época que aunque por edad no viví formaba parte indiscutible de mi vida. Dentro de mis limitadas posibilidades dada la distancia he tratado de apoyar con la ayuda de mi familia en Cuba a que toda esa historia que se guarda en las gavetas viera la luz y no fuese pasto del olvido. Si algo resulta aun mas satisfactorio es la posibilidad que he tenido de contactar gracias a este proyecto con personas que de algún modo estuvieron ligadas a mí y a mi familia y que hoy en día se encuentran en lugares tan distantes como pueden ser Canadá, Alemania, Italia, Puerto Rico, Estados Unidos y la propia Cuba. La semana pasada toda esta experiencia cobró mayor implicación cuando tuve el inmenso gusto de recibir la visita en mi casa de Gijón de la familia Balido (a la izquierda; haga clic sobre la imagen para ampliarla). Era algo inexplicable, pero tan real que superaba cualquier expectativa. Durante horas charlamos de nuestro pueblo y pude apreciar en la corta distancia que el más mínimo recuerdo estaba rodeado de un halo de amor con la pasión de quien disfruta por revitalizar el pasado sin miramientos mezquinos y a cambio de nada -- que es lo que realmente nuestro pueblo y nuestras gentes merecen. -Giraldo Raymond de Con, Gijón, Asturias, 3 de junio 2008
Estoy agradecida en poder conectarme con esta pagina y poder ver cosas del pasado, cosas que me traen recuerdo y otras las he visto por primera vez, no soy nativa de Santiago de Las Vegas pero tengo amigos y gratos recuerdos de ese pueblo, quisiera seguir visitandolo y poder conectarme con personas que he dejado atras y no he sabido mas de ellos, por aqui tal vez pueda tener noticias, por favor mi correo es miriamcadre@aol.com.
ResponderEliminarGiraldo si lees este mensaje conectate conmigo, me dio mucha alegria verte y saber de ti. Miriam