domingo, 13 de septiembre de 2009

Supersticiones santiagueras

por Consuelo Hernández Basabe / Miami, Florida

¿Recuerdan cuando éramos pequeños, todas las advertencias que nos hacían las personas mayores? "Eso es malo" o "Eso hace daño". Yo desde pequeña me rebelaba (por dentro, desde luego) y me decía "Cuando sea grande no voy a creer en eso". Y efectivamente, no soy supersticiosa. Éstas son las supersticiones que recuerdo:

  • No abrir la sombrilla dentro de la casa, pues atraería la mala suerte. 
  • Igualmente atraerían la mala suerte el barrer la casa de noche; prestar tijeras; cortar papel dentro de la casa; tirar sal al piso; prestarle sal a los vecinos. 
  • No poner un sombrero encima de la cama, pues anunciaba la muerte. 
  • No romper un espejo, pues traería siete años de mala suerte. 
  • No sembrar maticas de maní, pues atraería miseria. 
  • No meter el cuchillo en la candela, pues atraería al Diablo. 
  • No mecer un sillón vacío, pues atraería la muerte. 
  • Al pasar un entierro, decir "¡Solavaya!" para auyentar la muerte. 
  • No poner la cartera en el suelo, pues el dinero se va. 
  • No pasar debajo de una escalera, o no te casas. 
  • Llevar azabache para el mal de ojo. 
  • Usar el coral contra los ataques epilépticos. 
Otras creencias de mi niñez (en la década del 1940):
  • Si planchabas de día, no salir en la noche, pues te "pasmabas". 
  • No bañarse en la playa o en la casa acabado de comer (había que esperar tres horas), o te daba una embolia. 
  • Al salir del cine en la noche nos hacían taparnos la boca y la nariz para que no cogiéramos el "sereno" y nos resfriáramos. 
  • No comer plátano y tomar leche, pues resfriaba el estómago; lo mismo sucedía con la guanábana y la leche. 
  • Besar el pan antes de botarlo. 
  • No afeitarse o pelarse después de comer (daba una embolia). 
  • Después de dar a luz, la mujer debía esperar cuarenta días antes de lavarse la cabeza, o "el parto se le iría para la cabeza". 
  • Igualmente, la mujer no debía mirar un eclipse de luna si estaba embarazada, pues el bebé nacería con la mancha de la luna. 
  • Cuando se deseaba que una visita se fuera rápido, se colocaba una escoba con sal detrás de la puerta de la calle. 
  • Si había un rabo de nube (tornado), una persona experta lo podía "disolver". Una vez en la esquina de las calles 15 y 14, yo vi a una vecina de nosotros, a quien le decían Mariana la Tapastera, "cortar" en el aire con tijeras, y hacer cruces de cenizas en la calle para espantar un rabo de nube... y será coincidencia o no, pero el rabo de nube no pasó por Santiago.
¿Recuerda usted otras supersticiones santiagueras?

[Nota del editor: Nilia Coll nos cuenta que "cuando por casualidad aparecía un "rabo de nube" había que tirarle tiros para disolverlo o con una tijera cortarlo. Es muy cierto que cuanto tronaba mi abuela me ponía en la cama y después que pasaba hacia botes de papel para echarlos a la calle. ¡Qué maravilla de vida!"].

Artículo originalmente publicado en 2003 en el antiguo sitio de www.SantiagodelasVegas.org.

11 comentarios:

  1. Qué interesante recuerdo! Muy bien redactado... y no porque sea de mi adorada mami. No existía otra superstición... de no lanzarle una piedrita para espantar un pollo??? ;)

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  2. Gracias Consuelo por este artículo, tienes una memoria fabulosa, te felicito y continúa regalandonos cosas como esta.
    Un beso de todos para ti.

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  3. Consuelo se te olvido lo de subir los pies cuando estaba tronando,tapar los espejos tambien,amarrar un panuelo con un nudo cuando pasaba el cura por la pueta para encontrar novio.
    Tambiem me acuerdo cuando Palomino pasaba al frente de la casa con el carro de los muertos se tiraba agua y deciamos solavaya por mi casa nunca vayas.
    Mira que ironia, eso era todo los que nos preocuba en esos anos tan felices de nuestra ninez.Siomara.

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  4. Supersticiones santiagueras.
    Viernes Santos, no comer carne sin la autorización de un Cura.
    No hacer el amor el Viernes Santos para no quedar pegados las parejas.
    No hacer trabajos manuales,ni con machetes ni tijeras desde el jueves Santos a las 10 Am.
    No cortar las uñas los viernes para evitar dolores de cabeza hasta el otro viernes.
    Al caer un relámpago de día o de noche para evitar que un rayo fulminara la casa Mi madre y abuela decían Magnifica siempre con la Casa serrada.
    Sobre la leche nada eches.
    Los martes 13 ni te cases ni te embarques.
    gracias Raúl Rodriguez.

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  5. De este tema curioso e interesante de la Sra Consuelo,yo recuerdo con exactitud algo que jamas olvidare,yo asisti a un velorio de una tia abuela de una novia que yo tuve,que ella pertenece a la familia Alfonso,estas tias vivian en una casa colonial a la ssalida de Santiago justo en la finca San Rafeal,en la carretera del Rincon antes de llegar al Reparto Los Cocos,alli se velo su cadaver y pude observar como cubrieron todos los espejos ,radios y cuadros de fotos de los difuntos que colgaban de la pared con panos negros,nunca pregunte porque esa costumbre o superticion?era algo tenebroso y que jamas yo habia observado,recuerdo que la sra se llamaba Rosa Alfonso,alguien podria explicarme,de los mas veteranos,pues creo es algo de muy atras en costumbres de las familias del campo en Cuba.saludos santiagueros.Jorge Romero.

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  6. Jorge, Gracias por el interesante recuerdo. Mi abuela Altagracia Pérez Álvarez (Nana) decía que en la casa de sus abuelos, tapaban los espejos cuando alguien fallecía en la familia. Siempre había escuchado que esto es una costumbre judía, por lo cual supuse que quizás mis ancestros hayan sido de los muchos judíos conversos que adoptaron la religión católica para no ser expulsados de España, pero que conservaron algunas de sus creencias y prácticas, y con el paso del tiempo éstas perdieron su original significado y nadie recordaba su origen hebreo.

    Sin embargo, también es posible que no hayan sido descendientes de judíos conversos, sino que hayan visto la costumbre de tapar los espejos en otras casas (de vecinos que sí lo eran), y sin entender su origen, copiaron la práctica. Todos, al fin y al cabo, imitamos a los demás, ya sea en la moda, en la decoración, o en las costumbres y creencias.

    Busqué ahora una explicación de esta práctica en Google, y dice el rabino ortodoxo Ari Enkin de Israel que en una casa en shiva (donde hay luto) se cubren los espejos por dos motivos: uno, para que el que reza a Dios no se vea reflejado (rezarse a sí mismo no sería kosher, como quien dice); y dos, porque donde hay un muerto no debe haber vanidad.

    Interesante, ¿no?

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  7. Gracias, Balido por tu valiosa explicacion,tu sabes que Cuba es cosmopolita pues tenemos costumbres del Africa,Judia,Espanola(Catolica),arabe en fin todo se fue penetrando y a su vez aplatanando a la manera cubana como bien tu me explicas,gracias.

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  8. A las gallinas que cantan como Gallos en los campos tirar agua rápido para evitar muertes y de seguir cantando la Gallina para la cazuela.

    Perro que aulla como lobo anuncia ruina.

    Perros que hacen huecos con las patas delanteras anuncian la muerte del dueño.

    Patear latas de leche condensada vacía en las cuadras anuncian Ruinas,se gritaba solavaya.

    Tocar madera con los nudillos de las manos para limpiar lo malo.

    El grasnido de la lechuza anuncia muerte.

    Al ver un Cura dedos en Cruz y besarse la mano.

    Los martes mal día para comenzar tareas o visitas.

    Raúl Rodriguez.

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  9. Tres supersticiones más:

    1 La paloma Rabiche cuando canta en el campo los guajiros lo tienen como cosa de mal agüero.

    2 Cuando muere alguien y queda con los ojos abierto rápidamente con la yema del dedo se los sierran pues se platea que el muerto se quiere llevar a alguien mas.

    3 la mariposa grande y prieta nombrada bruja la tienen como cosa mala los guajiros con gritos de SOLAvalla la espantan y hasta matan,a ella les gusta posarse largo rato en las paredes.

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  10. Este es otro Raúl Ariel Rodrígues, solo que soy de Bejucal, pueblo vecino a Santiago de las Vegas. Tengo un blog parecido que es sobre la vida de mi madre y del pueblo de Bejucal, la Cuba de ayer, etc.
    bueno, pero muy bueno su blog.
    saludos,
    raulito

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